Todo empieza por una venganza... Un nuevo trabajo, una nueva vida cimentada en la noche, un nuevo objetivo, la otra cara de su persona... Dinero, alcohol, drogas, sexo, hombres, stripper. Un mundo en el que nuestra protagonista estará metida solo y únicamente por una razón: Vengarse y encontrar la felicidad.















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sábado, 12 de marzo de 2011

"Vida Sin Luz" Capítulo 20 : Segunda Parte

Esperé unos diez minutos a que me calmara por la situación vivida hace unos momentos. Cuando estuve más tranquila, descolgué el inalámbrico y marqué el número de Soraya.
- ¿Sí?
- Hola guapa. Soy Michelle.
- ¡Hola mi niña, cuanto tiempo! ¿Qué tal estas, te encuentras bien?- se escuchó la voz preocupada de mi amiga. Sonreí para mis adentros.
- Sí, pero te necesito más que nunca. Tengo que contarte y no puedo salir de casa. ¿Podrías venir a mi casa y hablamos?
- ¡Por supuesto! Estoy allí en un periquete. Adiós guapa.
- Adiós.
Colgué y me recosté en el respaldo del sofá. Con las rodillas pegadas a mi pecho y mi barbilla en ellas, suspiré de forma pesada. No podía creer que Marcos se haya puesto de esa manera tan de repente. Algo en su cabeza tendría que estar rondando. Estaría nervioso por todo lo que ha sucedido en tan poco intervalo de tiempo, pero yo no tengo la culpa de eso; al contrario, soy la víctima de todo.
Me estaba dando cuenta ahora mismo, que Marcos me importaba más de lo que pretendía aparentar. Sabía que era alguien fundamental en mi vida, pero por cómo se había puesto conmigo… me dolió bastante. Es parecido a una pequeña herida. Cuando te cortas con algo afilado, pero el corte no es profundo. Es pequeño, pero escuece horrores. Una sensación parecida tengo en el pecho. En la parte izquierda, a la altura del corazón. Me estaba costando respirar. El nudo de mi garganta no tenía piedad de mí y apretaba de forma asfixiante. Comencé a respirar profundamente, intentando que lo hiciera de forma constante. Lo estaba consiguiendo sin contar con la lágrima que descendía por mi mejilla derecha. Dios, no podía estar así con él. No, con él no soportaba estar de esta manera. Hablaría después de que se marche Soraya.


Diez minutos más tarde…

El timbre sonó. Me removí somnolienta en el sofá. Me desperecé y fui hacia la puerta con pasos pausados. Me había quedado dormida y sin darme cuenta. Miré por la mirilla y vislumbré la cabellera rubia enfrente del visor. Sonreí. Abrí la puerta y seguía sonriendo. Ella también lo hacía y nos fundimos en un gran abrazo. Me transmitió tranquilidad y esperanza. De que todo iba a salir de maravilla, que ella estaba allí y que no se marcharía nunca de mi lado hasta que yo estuviera plenamente bien.
Después de un rato, que parecía eterno, nos desprendimos y nos dimos dos besos sonoros. Sonreíamos como si fuese el mayor regalo el habernos visto, como si hiciese milenios que no estuviésemos juntas.
La hice pasar al recibidor y seguidamente, al salón. Estuvimos hablando de lo que me había pasado en aquellos días. Lo de Laura, que llamó Marcos. Sabía que él estaría posiblemente escuchando, así que la dije que no tenía la culpa de nada. Lo pensaba sinceramente, pero lo decía para que él se convenciera. Le expliqué todos los detalles y Soraya pensaba lo mismo que yo; que Marcos no tenía la culpa, que no podía saberlo.
- Él no tiene la culpa, Michelle- dijo preocupada alzando un poco la voz.
- Si ya se lo he dicho yo, pero no está muy convencido.
- Es normal que se sienta culpable si la ha llamado él mismo.
- Sí, pero no tenía ni idea de nada. Ni que nos lleváramos mal, porque disimulábamos para que estuviera feliz.
- Pues mira hasta donde ha llegado la muy…- blasfemó por lo bajo.
- Tranquilízate Soraya- sonreí al ver tan malhumorada a mi amiga.
- ¿Y no has pensado que ella tenga que ver con los mensajes?
- Pues no lo sé. Es una probabilidad, pero… la otra vez, cuando entró a mi casa, era la voz de un hombre.
- Puede ser su compinche, que sea su pareja o algo.
- Sí, es una posibilidad, porque la escuché hablar con el móvil a alguien y le dijo cariño- susurré para que la información no llegase a los oídos de Marcos.
Soraya abrió los ojos desmesuradamente sin creerse lo que le acababa de contar. Yo asentí con la cabeza para confirmarle lo que la había contado. Ella me cambió de tema y estuvimos viendo una película. A las dos horas se marchó.
En todo el rato que había estado hablando con mi amiga, no paré de pensar en él. Necesitaba urgentemente hablarle y solucionar las cosas.
Me dirigí al dormitorio de invitados, donde horas antes Marcos dio un portazo con todas sus ganas y fuerzas. Toqué con los nudillos la puerta. Esperé un poco para recibir respuesta, pero ésta no llegó. Opté por abrir la puerta sigilosamente. Estaba tumbado en la cama, bocabajo. Los ojos los tenía cerrados y la respiración acompasada. Se encontraba dormido plácidamente. Le agité un poco al sentarme en la cama, en su regazo. Le acaricié la mejilla suavemente y le di un beso en los labios, con cuidado. Él se despertó, abriendo los ojos despacio. Asomó su sonrisa torcida y después se incorporó. Seguía teniendo la sonrisa en su rostro y yo solo agaché la cabeza, cabizbaja. Me agarró de la barbilla, haciendo que me arrimara una pizca hacia él. Yo incrédula y sin saber qué pretendía, me dejé llevar. Le necesitaba. Mis lágrimas corrían veloces por mis mejillas al tiempo que acompañaban un grito ahogado procedente de mi garganta. Me limpió con delicadeza los ojos, eliminando posibles derrames de líquidos por mis mejillas ya mojadas. Una última se posó en mis labios. Al instante, Marcos se acercó y me besó; degustando el sabor salado de aquella gota de tristeza. Volvió a besarme, una y otra vez. Entrelazando nuestras lenguas nos sumergimos en una burbuja difícil de estallar. Me agarró por la cintura, consiguiendo que me tumbase a su altura y a su lado. Me acarició mientras seguía unidas nuestras bocas. Saboreando cada aliento y cada respiración que se tornaba agitada a medida que avanzábamos. Ahora me urgía más que nunca estar con él. Un calor por mi espina dorsal, subía a velocidad imparable. Comenzamos a tocarnos, a darnos placer y a respirar el jadeo del otro.

3 comentarios:

  1. me encantaa guapisiimaa sabes k lo aces genial? si no lo sabes te lo digo yooo ajjaja lo as dejao super interesante para k siga escribienod ajajajaja tqqq =)

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  2. me encanta el capitulo entero me e leido las dos partes y esta perfecto no me imaginaba la reaccion de amrcos al llegar, pero espero k no cambie y sepa tratarla pork se lo merece uff
    espero el sigiente wapas besos :)
    os kiero

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  3. :) Aiis que chulo este !! Siempre me gusta ver como los personajes hacen las paces ^^ Pero una dudilla.. Les dará tiempo a terminar antes de que venga Soraya ?? xDD

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